Septiembre está a la vuelta de la esquina y eso implica la vuelta a la rutina de trabajo, al deporte y a comer saludable para acabar con los excesos de las vacaciones de verano… pero no te preocupes, el Fitboxing es el deporte ideal para recuperar la forma, y te explicamos el por qué. 

 

El Fitboxing es un estilo de entrenamiento HIIT (High Intensity Interval Training), es decir, entrenamiento con ejercicios de alta intensidad y que como bien indica su nombre une diferentes modalidades deportivas como el boxeo, el crossfit, fitness, kickboxing y muay thai. Un entrenamiento muy completo que apenas dura 50 minutos, en el que el ritmo de los golpes lo marca la música.  Entrenamiento intensivo, en poco tiempo y lúdico. 

 

¿Eres nuevo en esta disciplina? ¡No te preocupes! Es un entrenamiento pensado para que se adapte a la persona y no al revés; su nivel de intensidad se ajusta a las limitaciones de cada uno y a la intensidad de nuestros movimientos. Eso sí, el fitboxing requiere un proceso inicial de aprendizaje y de adaptación para poder adquirir técnicas básicas de movimientos y combinaciones de golpes.

También tendrás que tener buena memoria, ya que los ejercicios y golpeos (la sesión) se repetirán durante varias semanas para que poco a poco se pueda ir perfeccionando los movimientos y poder obtener mejores resultados. Los sacos son profesionales y llevan instalados unos mecanismos que son capaces de medir la fuerza y la intensidad con la que golpeas. Al final de cada entrenamiento tendrás un pequeño resumen de cómo ha ido tu entrenamiento, una herramienta  perfecta para retarte a ti mismo a conseguir mejores resultados en los próximos entrenamientos.

 

Y así es como funciona una clase de Fitboxing: 

  • Calentamiento (de aproximadamente 15 minutos) con ejercicios de cardio y tonificación para activar la musculación. 
  • Entrenamiento de boxeo y kickboxing a ritmo de música. Se realizan 8 rondas de 2 minutos de ejercicio en el saco, combinados con 8 ejercicios de 1 minuto de bodyweight (entrenamiento con el propio peso, sentadillas, burpees, flexiones, etc.)
  • Sesión de 10 minutos de entrenamiento funcional (fitness) con la ayuda de bandas de resistencia, TRX, fitball, entre otras herramientas. 
  • 6 minutos de actividades de tonificación 
  • 10 de estiramientos para finalizar

 

Como ya hemos mencionado anteriormente, son entrenamientos HIIT, ejercicios de alta intensidad que activan el metabolismo, es por eso que en una clase de Fitboxing se pueden llegar a quemar hasta mil calorías, (dependiendo de la persona), pero dejando de lado los números, lo realmente importante en este deporte son los beneficios que aporta a tu salud: 

  • Mejora de la coordinación y estabilidad
  • Definición y tonificación muscular
  • Mejora de la resistencia física
  • Mejora de la salud cardiovascular 

 

La franquicia que se ha hecho con esta disciplina es Brooklyn Fitboxing, y cuenta con más de 200 centros en todo el país. Este deporte se ha puesto muy de moda, ya que es un tipo de entrenamiento de intensidad alta, de poca duración y muy entretenido. Además, por mucho que se golpee un saco, no es un deporte de contacto, atributo muy ligado al boxeo. Esto ha hecho que gran parte de las personas que practiquen Fitboxing, aproximadamente el 70%, sean mujeres. 

 

Deporte y solidaridad

Otra de las cosas a destacar de este deporte es que te permite entrenar y ser solidario a la vez. La energía acumulada en los sacos de boxeo se puede donar; al final de cada entrenamiento tú decides a qué proyecto quieres que Brooklyn Fitboxing done dinero. Nada mejor que poder hacer deporte y aportar un granito de arena a una causa benéfica. Cada año aproximadamente donan más de 10.000$ a proyectos solidarios. 

 

¿Y tú, te unes al Fitboxing?

 

Foto: Palco 23